UC - Críticas
| Países: España y Colombia. Año: 2011.
Dirección y guion: Antonio Trashorras. Producción: M.A. Faura, Mercedes Gamero, Enrique Parbus y Cristian Conti. Música: Alfonso Conde. Fotografía: Javier Salmones. Montaje: Jorge Macaya. Dirección artística: Javier Alvariño y Juan Carlos Acevedo. Distribuidora: DeAPlaneta.
Estreno en España: 1 Marzo 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 12 años. |
Interpretación: Ana de Armas (Rosa), Leonor Varela, Diego Cadavid, Jeff Gum. |
MI TENEBROSA LAVANDERÍA
"El Callejón" es un film de terror tan malo que me lo ha hecho pasar teta. Esta contundente afirmación puede resumir mis sensaciones ante esta película realizada por el crítico cinematográfico Antonio Trashorras, fanático del cine de género que, valiente y suicida, ha realizado un "slasher" con inesperado giro final hacia el fantástico, despojado de complejos ni ambiciones, más allá de divertirse como un enano mientras la rodaba y entretener al público que entre en su juego cinéfilo. Muchos no lo harán y denostarán la propuesta, pero a mi, una vez superada la perplejidad inicial que puede sentir el que se enfrenta a un producto de Serie B por primera vez, me ha divertido mucho más que otros productos de terror reciente con gran éxito en taquilla como la mediocre "Mamá".
SINOPSIS: Durante una noche invernal en una localidad costera, Rosa se ve obligada a hacer la colada en una lavandería de autoservicio situada en un oscuro y desierto callejón. Allí la joven sufrirá por sorpresa el acoso de un asesino en serie. Aislada y sin poder salir del reducido espacio de la lavandería, Rosa se verá inmersa en un sádico juego.
"El Callejón" es sólo eso, una búsqueda constante y consciente de los estereotipos y lugares comunes del género, pero no desde la desidia habitual sino desde el amor por ese tipo de cine. La apertura de créditos ya nos coloca en situación, una escena verdaderamente "kitsch" donde la sufrida protagonista, la televisiva Ana de Armas, nos deleita con un festivo baile con fondo psicodélico en croma. Y es que eso resume perfectamente lo que es el film, una pura diversión sobrepuesta a una historia prefabricada con el único objetivo de jugar no "con" el espectador sino "junto" al espectador. También parece hecha a conciencia la fotografía llena de neones efectuada por Javier Salmones, que dota de una curiosa aureola a la localización, en un punto indeterminado entre una calle desechada de la ciudad zoetrópica del "Corazonada" de Coppola y otra del plató de "Barrio Sésamo".
"El Callejón" no pasará a la historia del terror ni lo pretende. Tampoco se puede asegurar que nadie vaya a pasar miedo durante la proyección, no es eso lo que busca. Su crítico-director Trashorras, aún a sabiendas de los palos que va a recibir, hace lo que le da la gana y lo disfruta (y nosotros con él). La película sucede casi exclusivamente en el interior de una lavandería y el callejón donde se ubica, no necesita más para dar rienda suelta a todas las "putadas" que deberá recibir la "scream queen" de turno, como debe ser, una joven guapa y sexy, con escote pronunciado y mucha ingenuidad, papel que cumple con corrección la cubana Ana de Armas. Tal vez, lo peor es el antagonista, el "malo" que parece bueno y se convierte en algo diabólico interpretado por el actor Diego Cadavid, está descontrolado, se le va la mano y su histrionismo no funciona, suerte que en el momento álgido sale a su rescate una Leonor Varela mucho más entonada. "El Callejón" es un regalo para los amantes del cine cutre, la serie B y Z, fans del fantástico (impagable ese final pegajoso bajo el amanecer) y frikis del terror palomitero con mucho bagaje cinematográfico (esa pantalla partida a lo Brian de Palma).
(inglés)